Una vez más llegamos a Arequipa, esta bella ciudad que fue nombrada por la UNESCO como Patrimonio Cultual de la Humanidad en el año 2000. Siempre lo decimos: Arequipa es una de nuestras ciudades favoritas y nos gusta regresar una y otra vez a esta gran urbe.
Aprovechamos las ofertas en vuelos y el pasaje nos costo algo de 55 dolares, de este modo salimos al mediodía de Lima hacia la Blanca Ciudad, nos hospedamos cerca de la plaza de armas en un hotel cómodo, limpio y no muy caro. Como el Monasterio de Santa Catalina estaba frente a nosotros decimos indagar un poco para poder ingresar. Grande seria nuestra sorpresa al enterarnos que la entrada es carisima, casi un asalto a mano armada, pero la persona que nos atendió, nos dijo que en dos días la entrada costaría solo 10 soles. Sabiendo esto, decidimos esperar esos dos días y por mientras conocer otros atractivos de la ciudad. Pensamos en el Museo de Santuarios Andinos, donde se ubica la Momia Juanita, pero tampoco es tan económico el ingreso, además que no se permite filmar o tomar fotos dentro; de nuevo otra decepción. Regresamos a la plaza de armas a almorzar algo y después de comer decimos averiguar como llegar al Santuario de la Virgen de Chapi. Para el santuario las movilidades salen temprano todos los días, así que paseamos un poco por las calles cerca a la plaza y fuimos a dormir temprano en la noche.
El Santuario de Chapi es el más famoso de todo Arequipa, cada año son miles de feligreses los que llegan a su fiesta celebrada en mayo. Se encuentra casi en el limite de los departamentos de Arequipa y Moquegua en una quebrada seca y árida, donde no encuentras casi ninguna fuente de agua y las poblaciones más cercanas se encuentran a varios kilómetros de camino.
Ruta desde el Ovalo del Avelino hasta el Santuario de Chapi
Salimos temprano del Ovalo del Avelino en una couster que sale por Socabaya, pasa por el distrito de Yarabamba (tierra de las peleas de toros) para luego subir en zig zag por unos cerros, una zona llamada "Cuesta de Hornillos" que quedan al lado derecho del volcán Pichupichu. La pista llega a la cima y es a partir de este paraje con algunos arbustos llamado "Pampa Tumbambay", ubicado a los 3200 msnm (punto más alto del trayecto), que empiezas a notar que los cerros tienen como arena gris o media blanquecina en su topografía, conversando con el conductor, nos dice que esa arena es en realidad ceniza volcánica. ¿Y de donde proviene esa ceniza?, pues son los restos dejados por el volcán Huaynaputina, volcán que erupcionó en el año 1600 causando estragos en las ciudades de Arequipa y Moquegua. Hasta hoy en día se considera a la erupción del Huaynaputina como la más violenta en la historia de Sudamérica y sus cenizas lograron esparcirse hasta a 600 km del volcán. Demás esta decir que todos los volcanes importantes como el Coropuna, Misti, Ampato, etc también se observan desde este punto. Sin duda alguna es un gran escenario donde tomarse fotos, ya que las panorámicas son impresionantes. Allí estábamos nosotros, buscando un santuario a la vista de los grandes Apus, ¿que más podíamos pedir? lo teníamos todo, hermosos nevados, cielo totalmente azul y un aire puro que te hace sentir vivo.
Luego empezó el descenso. No se observa ninguna población cercana, ni mucho menos alguna fuente de agua. El clima en especial se hace más seco, hasta que por fin después de descender tantas curvas llegamos a lo que parece ser un caserío. Las casas son precarias, muchas son de esteras, pero venden todo tipo de bebidas y comidas: estamos al fin en el pueblo de Chapi. Ingresamos al patio de estacionamiento que a pesar de no estar en fiesta se encuentra lleno de vehículos. Esa fue nuestra primera impresión de que estábamos ante algo muy importante.
Al salir del estacionamiento y entrar al santuario nos dimos cuenta de que es muy grande, tiene un área de casi 7300 m2 y a pesar de no haber llegado en día de fiesta, son muchos los peregrinos que llegan. Ese día era domingo y se realizarían dos misas. Habíamos llegado a la misa de las 11:30 a.m. y la gente poco a poco comenzaba a llenar el santuario-templo. Antes de iniciar la misa dimos un recorrido por los alrededores y vimos la gran magnitud de todo el santuario, que comprende grandes accesos a la explanada, la torre, la plaza de peregrinos, la capilla de la reconciliación, etc. Todo muy llamativo, vistoso y sagrado. Se acerca la hora de la misa y muchos se acercaban a orar lo más cerca posible de la virgen, otros se tomaban fotos para el recuerdo, pero lo que sorprendió más era el fervor religioso de la gente. Muchas personas llegaba llorando o se le caían las lágrimas con tan solo entrar al templo. Algunos rompían en llanto a mitad de la misa. Muchas personas de mucha edad y en sillas de ruedas llegan a pedir bienestar a la virgen. La fe que tiene la población en la virgen conmueve y se siente un ambiente lleno de religiosidad.
¿Como nació la historia de este santuario?, pues los pocos documentos de la época y las tradiciones orales narran que la imagen de la virgen Maria fue traída de España en el siglo XVIII por padres franciscanos o jesuitas e instalada en el valle de Chapi, en el limite de Arequipa y Moquegua. Pero debido a la indisciplina de los peregrinos que llegaban a su fiesta, estos arruinaban los cultivos y las casas, motivo por el cual se decide trasladar la imagen a Sogay. Así se inicia la mudanza y después de recorrer algunos kilómetros quebrada arriba, se detienen a descansar. Es en ese momento al querer mover la imagen, cae una lluvia de cenizas y comenzó a soplar mucho viento. Se quiso reemprender la marcha pero la imagen pesaba mucho más de lo normal y no se podía mover. Este acto fue interpretado como un hecho milagroso y los indígenas comenzaron a gritar: ¡¡Chaypi, Chaypi!!, que significa ¡Hasta aquí!. Luego con el tiempo la palabra Chaypi se castellanizo a Chapi y quedo con ese nombre hasta hoy. Levantaron un pequeño templo y con el pasar del tiempo adquirió más y más relevancia, hasta que se convirtió en una de las celebraciones más importantes de Arequipa.
Al salir del estacionamiento y entrar al santuario nos dimos cuenta de que es muy grande, tiene un área de casi 7300 m2 y a pesar de no haber llegado en día de fiesta, son muchos los peregrinos que llegan. Ese día era domingo y se realizarían dos misas. Habíamos llegado a la misa de las 11:30 a.m. y la gente poco a poco comenzaba a llenar el santuario-templo. Antes de iniciar la misa dimos un recorrido por los alrededores y vimos la gran magnitud de todo el santuario, que comprende grandes accesos a la explanada, la torre, la plaza de peregrinos, la capilla de la reconciliación, etc. Todo muy llamativo, vistoso y sagrado. Se acerca la hora de la misa y muchos se acercaban a orar lo más cerca posible de la virgen, otros se tomaban fotos para el recuerdo, pero lo que sorprendió más era el fervor religioso de la gente. Muchas personas llegaba llorando o se le caían las lágrimas con tan solo entrar al templo. Algunos rompían en llanto a mitad de la misa. Muchas personas de mucha edad y en sillas de ruedas llegan a pedir bienestar a la virgen. La fe que tiene la población en la virgen conmueve y se siente un ambiente lleno de religiosidad.
¿Como nació la historia de este santuario?, pues los pocos documentos de la época y las tradiciones orales narran que la imagen de la virgen Maria fue traída de España en el siglo XVIII por padres franciscanos o jesuitas e instalada en el valle de Chapi, en el limite de Arequipa y Moquegua. Pero debido a la indisciplina de los peregrinos que llegaban a su fiesta, estos arruinaban los cultivos y las casas, motivo por el cual se decide trasladar la imagen a Sogay. Así se inicia la mudanza y después de recorrer algunos kilómetros quebrada arriba, se detienen a descansar. Es en ese momento al querer mover la imagen, cae una lluvia de cenizas y comenzó a soplar mucho viento. Se quiso reemprender la marcha pero la imagen pesaba mucho más de lo normal y no se podía mover. Este acto fue interpretado como un hecho milagroso y los indígenas comenzaron a gritar: ¡¡Chaypi, Chaypi!!, que significa ¡Hasta aquí!. Luego con el tiempo la palabra Chaypi se castellanizo a Chapi y quedo con ese nombre hasta hoy. Levantaron un pequeño templo y con el pasar del tiempo adquirió más y más relevancia, hasta que se convirtió en una de las celebraciones más importantes de Arequipa.
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Terminada la misa las personas salen y dejan sus peticiones en unos mantos sagrados. En el cerro aledaño hay muchas pequeñas construcciones de piedra con velas dentro de ellas. "¿Para que sirve esos pequeños cercos de piedra?" Le preguntamos a una vendedora ambulante. "Si hace un cerco y deja velas, significa que la persona le esta pidiendo una casa nueva a la virgen. Si funciona joven, al hacerlo mínimo este año tendrá su terreno" Fue lo que nos contesta la señora. La gente cree mucho en esto, porque todo mundo hace su cerco con velas.
Antes de que la gente se retire del santuario, todo mundo hace bendecir sus movilidades. El padre pasa vehículo por vehículo y rocia el agua bendita sobre los motores y los asientos. Es increíble ver que la gente hace un viaje no muy corto solo para buscar una bendición.
Terminada la bendición dada por el cura, todos proceden a retirarse. A pesar de ser domingo, el templo se habia llenado, no imaginamos como sera en fecha de fiesta, pero quedamos impresionados con la enorme fe que tienen los creyentes en la madre de Jesus. Regresamos contentos a Arequipa con la bendición de la Virgen Maria.
Datos interesantes
- Las misas en Chapi son diarias: Lunes a Sábado a las 10:30 a.m. y domingos a las 9:30 a.m. y 11:30 a.m.
- Los colectivos a Chapi salen del ovalo del Avelino y cobran 25 soles. El servicio incluye la ida y la vuelta. Al terminar la misa te espera para regresarte a Arequipa.
- En Chapi hay muchos restaurantes de infraestructura muy precaria, no todos preparan buena comida, pregunten al conductor del colectivo cuales con confiables.
- El tiempo de viaje de Arequipa a Chapi dura alrededor de 1 hora.
